miércoles, abril 16, 2008

Yo y mi casa serviremos a jesucristo

Hay quienes no ven sus hogares como un lugar santo. Muchos han subestimado el propósito de Dios para el hogar y la familia.
Existe un gran número de familias que son cristianos reverentes solo mientras dura el servicio.
¿Cuál fue el último mensaje de Josué para el Pueblo y también para su casa?
Josué 24:14-15 “Ahora, pues, temed a Dios, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Dios. 15 Y si mal os parece servir a Dios, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Dios”.

Después de la muerte de Moisés, Dios eligió a Josué como el nuevo líder de Su pueblo. ¿Por qué Dios lo escogió a él?
Dios lo escogió porque él siempre se mantuvo fiel a Su palabra. Dios lo escogió porque Josué confiaba completamente en su palabra:
Mientras todos decían “Volvámoslo a Egipto” Josué decía: “Dios nos dará esta tierra que fluye leche y miel no seáis rebelde contra Dios ni tengáis miedo, a los pueblos que habitan allí los comeremos como pan” (Núm.14:6-8.)

Esta confianza y esta lealtad fue recompensada por Dios “Tomó Josué toda la tierra y él la repartió por herencia a los Israelitas” (Josué 11:23.)
Mas de 30 reyes y ciudades fueron derrotadas por su mano; Israel conquisto toda la tierra al este y al oeste del rió Jordán
Todo esto lo pudieron hacer porque Josué se mantuvo fiel a Dios, y confiaba en Su palabra.
En este punto de la historia Josué ya era de edad avanzada y estaba a punto de morir (Josué 23:1.) “Siendo Josué viejo y avanzado en años”
Pero antes de morir Josué tenia una última advertencia a su familia - pueblo.
“Ahora, pues, temed a Dios, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Dios.”
Le habló estas palabras porque él conocía muy bien sus debilidades; él sabía lo idolatra, y lo rebelde que habían sido, y no quería que volvieran a caer en esos mismos pecados nuevamente. “Ahora, pues, temed a Dios, y servidle con integridad y en verdad.”
Josué está pidiendo al pueblo que honre, y respete a Dios, sus mandamientos y enseñanzas. Esto es algo que olvidan muchos creyentes. Los que dicen ser hijos de Dios, y que conocen la verdad y la sana doctrina.

¿A cuantos El hogar, la familia, y el diario vivir les delata su falta de temor a Dios? Aunque con la boca demuestran piedad, pero la realidad es que aun tienen dioses ocultos que no han abandonado del todo: “Por sus frutos los conoceréis”
El hogar cristiano ha decaído en gran manera, es común ver como algunos que profesando ser cristianos, permiten que sus hijos introduzcan imágenes, ídolos, y otras muchas cosas que son abominación a Dios en sus casas (Éx. 20:3-5.) Josué dijo “servidle con integridad y en verdad.”
No podemos considerarnos parte del cuerpo de Cristo si no estamos sirviéndole con integridad y Verdad. “El hombre de verdad tendrá muchas bendiciones”
Cuál será la opinión del señor de aquellos que dicen ser de Dios: Cuidado el señor advirtió: “No todo el que diga señor, señor entrará al reino de los cielos..Yo les declaré Nunca os conocí apartaos de mi hacedores de maldad” Mt.7-21
Sabia ud. que cuando nosotros hablamos nuestros rostros delata quien controla la mente y el Corazón?

  ¿Quién controla tu vida, mente, tus pasos? Dios o Satanás.
Si en nuestro hogar no estamos enseñando a nuestros hijos a conducir sus vidas en santidad, entonces no estamos sirviendo a Dios con integridad y en verdad.
Cantar es bueno pero no es suficiente, orar y leer la Biblia también es bueno.
No es suficiente sino hacemos lo que cantamos y leemos. “Haced morir lo terrenal en vosotros”
“Quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto; y servid a Dios.”
Josué esta refiriéndose a los dioses que ellos habían servido, dioses de madera o piedra, dioses hechos por el hombre sin poder alguno
Algunos dirá “Yo no tengo nada de eso en mi casa” Quizás sea así. pero sirves con los ojos puestos en el mundo. “No améis las cosas del mundo”
Si en tu hogar no se ora con frecuencia, si tu familia no se une para alabar a Dios, si no enseñas a tus hijos a vivir vidas en obediencia y santidad, entonces tu casa esta llena de dioses y hoy ha llegado el momento de escoger, como Josué debes tomar Una desición.
“Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis.”

Josué tomó su decisión, “yo y mi casa serviremos a Jehová.”

En la iglesia nos reunimos, en la iglesia compartimos, pero el compromiso con Dios, y la santidad comienza en el hogar. La iglesia es un lugar santo, y tu casa también.
“Yo y mi casa.” Era un compromiso de verdad con Dios. Como cabeza de su familia, Josué declaro que nadie en su familia comprometería su fe. Su casa, su familia, sería un lugar santo. Esto es algo que muchos debemos aprender hacer.
Tenemos que tomar el lugar de autoridad que Dios nos ha entregado, y con esa autoridad tenemos que echar fuera de nuestros hogares, toda obra del enemigo. Obras que nos alejan de la presencia del señor. ”Amados no imitéis lo malo sino lo bueno, el que hace lo bueno es de Dios” (3Jn. 11;)
Las malas Obras hacen que contristemos al espíritu de Dios. ¿Qué adoración es aquella que siente la presencia solo cuando El predicador le agrada, si no le gusta. No se goza y no levanta ni una mano al cielo? ¿Qué es eso? “No contristéis al espíritu santo” (Ef.4:30.)
Lo dije al comenzar, muchos no ven sus hogares como un lugar santo, no lo ven de la misma manera que ven la iglesia, y esto es una manera muy equivocada de pensar.

Es hora de permitir que el Espíritu Santo sea reflejado en todo lo que hacemos hermanos. El proclamar la verdad de Dios traerá adversidad pero tenemos que permanecer firmes en la Palabra.
El verdadero hijo de Dios tendrá que beber tragos muy amargos con amistades, familias, y compañeros, pero recuerde que mucho más sufrió Cristo.
Deje ya de justificar las malas acciones, deje ya de justificar el pecado. Haga un compromiso verdadero con Dios, y diga “hoy yo y mi casa serviremos a Jehová.”

Jesús Bendiga la casa de los que temen a Dios