2 Samuel 5:6
Tenemos una historia del
reinado de David, que inicia con una declaración. David comienza a enfrentar el
primer acto militar luego de ser declarado rey. 2S 5:3 Así pues, todos
los ancianos de Israel fueron a Hebrón para hablar con el rey David, y allí el
rey hizo un pacto con ellos en presencia del SEÑOR. Después de eso, ungieron a
David para que fuera rey sobre Israel. En el primer acto que va a realizar, sus enemigos le mandan un mensaje
cuando lo ven que se está preparando para la batalla. Jerusalén es una ciudad
complicada por su ubicación geográfica
por eso su primer reto es tomar esta ciudad muy complicada, y ya antes
se había dado una referencia acerca de esta ciudad (Jueces 1:21) En cambio, los de la tribu de Benjamín no lograron expulsar a los
jebuseos, que vivían en Jerusalén. Por eso hasta el día de hoy los jebuseos viven
con los benjaminitas en Jerusalén.
Este es el primer
referente acerca de esta ciudad, llamada Jebus. Por tanto David en su primera
decisión como rey es tomar una ciudad que no había sido tomada ninguna vez.
Jerusalén no se les facilita a ningún reino para conquista, es porque las
montañas siempre han sido difíciles de conquistar, es por esto que en las
guerras quienes están en la montaña llevan siempre la ventaja. Cuando David va
a atacar le mandan este mensaje:
“No entrarás
a la ciudad” Ellos están seguros, porque ya muchos lo
habían intentado pero no lo habían logrado. A David con lo peor del ejército
enemigo lo van a hacer pedazos, según lo que pensaban los Jebuseos. Con esto
cualquier otro se pudo volver hacia atrás porque ¿qué garantía tenía de
alcanzar lo que otros no habían podido? ¿Por qué David tenía la fe necesaria de
pensar que lo iba a lograr? Porque ni los mejores soldados de antes lo
habían logrado, ni Caleb, ni Josué.
¿Cómo vivimos las realidades de nuestra vida en la que se nos plantean
desafíos que son más grandes que nosotros? ¿Cómo podemos lograr algo que otros
no han podido y al final los ha afectado tanto? ¿Cómo podemos nosotros en lugar
de desanimarnos y quedarnos sin intentarlo, lanzarnos a conquistar nuevos
retos? Algunos de nosotros, vemos una una amenaza y ya estamos
desmotivados sin ganas de hacer nada, y nos ponemos a decir: “Esto es lo mismo
que afecto a aquel…” Y nos vemos en la misma lógica que a otros pasó.
El enemigo es
humillante
A David lo amenazan y hasta lo quieren humillar. Y nosotros ¿En las que pensamos que no vamos
a alcanzar nunca los resultados que queremos? Cuando esta clase de dudas vienen
a nuestro corazón empezamos a hacer cosas que no debemos de hacer, a tomar
otros caminos. Si David viendo al pasado hubiera dicho “De verdad ¡Nadie lo
ha podido hacer!” Y lo más duro no es que solo nosotros pensemos eso sino
que sean otros los que nos dicen que no vamos a lograr las cosas y aún más si
son los mismos padres que desmotivan a los hijos diciéndoles todo lo que no van
a poder ser.
El enemigo te dice que no mas Dios
dice: DIJO Saúl a David: No podrás tú ir contra
aquel filisteo, para pelear con él; porque tú eres muchacho, y él un hombre de
guerra desde su juventud. David
respondió a Saúl: Tu siervo era pastor de las ovejas de su padre; y cuando
venía un león, o un oso, y tomaba algún cordero de la manada, salía yo tras él, y lo hería, y lo libraba de
su boca; y si se levantaba contra mí, yo le echaba mano de la quijada, y lo
hería y lo mataba. Fuese león, fuese
oso, tu siervo lo mataba; y este filisteo incircunciso será como uno de ellos,
porque ha provocado al ejército del Dios viviente.
¿Por qué
tenemos esta actitud ante lo inconquistable? ¿Porque creemos que tenemos que
repetir el fracaso de otros?
¿porque creemos que lo que destruyo a otros nos va a destruir a nosotros?
¿Acaso no tenemos a Dios? ¿Con quién caminamos entonces? ¿en una una iglesia? ¿O
Una religión? ¿Cuál es nuestra vida espiritual? ¿Tienes un llamado divino o uno
humano? Si es con Dios que decidimos caminar entonces reconozcamos que lo
que otros no han hecho, nosotros si lo lograremos porque caminamos con él, y
hasta se podrán burlar de nosotros como José y sus sueños. Su vida nos inspira
a decir ¡¡¡todo es posible!!!
(2Samuel 5:7-10 ) Pero David logró
capturar la fortaleza de Sión, que ahora se llama la Ciudad de David. 8 Aquel
día David dijo: «Todo el que vaya a matar a los jebuseos, que suba por el
acueducto, para alcanzar a los cojos y a los ciegos. ¡Los aborrezco!» De ahí
viene el dicho: «Los ciegos y los cojos no entrarán en el palacio.» 9 David se
instaló en la fortaleza y la llamó Ciudad de David. También construyó una
muralla alrededor, desde el terraplén[a] hasta el palacio, y se fortaleció más
y más, porque el SEÑOR Dios Todopoderoso estaba con él. La cosa no es si es cierto lo que los demás dicen, lo único que cuenta es
si el Señor está con nosotros o no. Los enemigos podían tener razón, tenían
todas las ventajas para destruir a David, pero el Señor es Dios en todo lugar,
y ese Dios es el que nos dará la victoria siempre si es que esta con nosotros.
Que hablen los enemigos todo lo que quieren, pero si Dios esta con nosotros
entonces tomaremos la fortaleza y nos adentraremos más y más.
Iremos más allá, de nuestros
límites fronteras, vamos a entrar, vamos entrar a lo inconquistable,
alas comunas, villas , ciudades, sectores que el enemigos nos ha dicho aquí no,
pero Jesús nos dice que si, vamos a entrar
¿Quiénes son los que dicen que nos quieren ver
derrotados? Si Dios esta con nosotros ¿quién contra nosotros?
Sal 60:9-12¿Quién me llevará a la ciudad
fortificada? ¿Quién me mostrará el camino a Edom? ¿No eres tú, oh Dios, quien nos ha rechazado?
¡Ya no sales, oh Dios, con nuestros ejércitos! Bríndanos tu ayuda contra el enemigo, pues de
nada sirve la ayuda humana. Con Dios
obtendremos la victoria; ¡él pisoteará a nuestros enemigos si Dios no te ha
dado fronteras , no te ha colocado limites a tu crecimiento, entonces tu no las
coloques. De él es la tierra ti y su plenitud
Las batallas no se
deciden por lo que tenemos, por lo que somos o lo que valemos, se deciden por
la presencia de Dios en nosotros. Dios que habita en las alturas y que sus
ejércitos son de millones no nos ha dejado solos. No importa como se burlen, ni
lo que nos digan. David se fortaleció más y más en su Dios.
Cuando nos sintamos que nadie nos ayuda en lo que estamos viviendo, y
cuando tu estas en crecimiento ya no estamos resentidos y viendo lo que otros
tienen, porque de nada sirve la ayuda humana, solo la ayuda viene de Dios.
David era un hombre de grandes convicciones y de gran gozo Ahora entiendo porque David en capítulo 6 después de la victoria Entonces David fue, y llevó con alegría
el arca de Dios de casa de Obed-edom a la ciudad de David.
¿Qué era lo que a David lo hacía danzar?
No era cofre de oro, ni los dos querubines no era
lo físico El veía al Dios de Israel
2Sa 6:14 Y David
danzaba con toda su fuerza delante de Dios; y estaba David vestido con un efod
de lino. Así David y toda la casa de
Israel conducían el arca de Dios con
júbilo y sonido de trompeta. No tenemos por qué sentirnos derrotados, no
tenemos que caer en la frustración solo por lo que nos dicen o por lo que
pensemos, debemos de buscar al Señor, danza con el gózate con él y respirará
olor a victoria y triunfo
¿Estamos encerrados sin lograr nada solo porque no queremos que los demás
piensen mal de nosotros? Pero David sabía que Dios estaba con él … hoy vamos a entrar a lugares donde nuca hemos estado, países que nunca hemos
ido, ciudades que no podemos por nuestra economía, o por nuestra cultura… !!Pero vamos a entrar en el nombre de Jesús
Jesus te bendiga
pastorpabloalarcon@gmail.com